Paradoja: Un Javier fuerte robustecería a Ernesto
SEGÚN LA LISTA nominal del 2012, que suman un millón, 872 mil 322 sonorenses, al dividirlo entre cien tendríamos el puntaje, de tal manera que un punto lo vamos a cerrar en 18 mil 500 votos.
En este ejercicio sirve para comprender la última encuesta (diciembre) a candidato a gobernador que aquí le publico íntegra, pero vale la pena hacer una serie de consideraciones, sobre todo en la hoja número ocho, cuando se pregunta al ciudadano quien sería su gallo por la gubernatura y es interesante observar, quitándole el más menos 3 puntos de margen de error, los resultados que arroja. La desarrolló la empresa de Heriberto Tapia quien es muy acertado.
Tenemos así por ejemplo que la separación que hay entre Ernesto Gándara (21.32) y Javier Gándara (15.57) es de 5.75 menos el 3 por ciento señalado, la diferencia sería de 2.75.
En votos, es tanto como hablar de 50 mil 875 votos en estos momentos, lo cual por supuesto que pinta si tomamos en cuenta que la diferencia de votos entre Guillermo Padrés (463,963) y Alfonso Elías (424,266) fue de 39 mil 697 votos. Emitió el sufragio el 53.5 por ciento del padrón.
En el 2003 votó el 54 por ciento de la lista nominal. Ganó Eduardo Bours (372,467) a Ramón Corral (364,544) con 7 mil 923 votos. Claro, siempre influyen los tiempos. La encuesta refleja a su vez que hay un 32.74 de indecisos que es la cereza en el pastel al significar en números gordos y concretos, la cantidad de 605 mil, 190 votos. Se necesitan en el pico alto algo así como 425 mil votos para ganar la gubernatura 23 puntos, pues.
Entremos al rubro de los escenario posibles que con estos resultados se asemeja a lo que tanto se ha escrito, con una diferencia que, conforme a los acontecimientos políticos recientes, quien siento que elevará su votación de los dos Gándara, será Javier.
¿Por qué?
1.- El fuego amigo en el PRI, donde hay cuatro candidatos posibles, se caracteriza por una falta de unidad en la cual no está dispuesto a colaborar –de momento--, el dirigente estatal, Alfonso Elías quien con su 5.6 puntos está en la fila. Ni se diga de Claudia Pavlovich (12.74) y de Toñito Astiazarán (2.64) pues ya sabemos cómo se las gasta con tal de contar con un capital que busque negociar con su futuro candidato.
2.- Si la designación del próximo candidato priísta es por encuestas, Ernesto Gándara lleva las de ganar. Si es abierta a la población, el Gobierno del Estado montará todo un operativo para que la candidata colorada sea Claudia (lógico) y si es por designación de consejeros, el dedo de Manlio definirá la circunstancia. Ahora bien, si es el presidente Enrique Peña Nieto es quien defina la situación, las posibilidades entre Claudia y Ernesto están con cierta ventaja para Gándara siempre y cuando el contrincante panista, Javier Gándara, repunte como sentimos que lo hará en los próximos meses.
Claro, claro, Beltrones por supuesto que influirá –aun y cuando muchos alegan que será quien designe al candidato--, pero los tiempos serán otros: un Peña en un segundo y tercer año muy fortalecido que va a querer gobernadores afines y allí es donde la puerca puede torcer el rabo.
3.- Los panistas por su parte, negocian fácilmente pues su jefe político, el Gobernador, ya dijo que el ungido es Javier y las circunstancias traerán en consecuencia que se le unan el resto de los contendientes en pro de conservar el poder. ¿Qué puede tumbar a Javier de esta candidatura?... nadie, pues la ricachada sonorense, la casta divina (a la cual aspiran muchos funcionarios que creen que lo lograron, pero no es tan fácil pues se requiere pedigree) está con Javier por un lado preferente, pero interesados como son, ven en el plebeyo Ernesto a alguien que si bien no los beneficia, tampoco los perjudica. Esta casta es la que no pudo reunir en noviembre Samuel Moreno y quien no aparece en las listas de aspirantes.
4.- El Gobierno del Estado desde enero, con seguridad, empezará a pujar por sostener una imagen que permita a Javier, con apoyos populares gubernamentales, que utilice la imagen de Padrés como apoyo. Sin embargo, esto tiene dos vertientes:
a).- Como dijo Eduardo Bours cuando señaló que se equivocó al utilizar esta estrategia, si para finales de marzo –fecha para culminar el pago de revalidación de placas--, Javier Gándara no sube más, entonces lo más seguro es que se de un rompimiento estratégico entre Javier y la imagen de Gobierno que para él sería lo ideal. Incluso, no dude usted que lo haga y Javier –quien será su propio coordinador de campaña--, puede propiciar este esquema pues ya demostró que fue posible hacerse a un lado a quienes empuñan el fuego amigo dentro del PAN. ¿O acaso no bajaron la guardia tanto Pancho Búrquez como David Figueroa quienes no se saben dónde anda ni que están haciendo para levantar sus bonos?
b).- Si la imagen de Javier sube en esos tres meses y rebasa la de Ernesto Gándara, hablaríamos de que, curiosamente y según dicta la lógica, al PRI no le quedaría de otra que apoyarse en Ernesto para que sea candidato toda vez que la imagen de Claudia se estancó y requiere por ello meterle mucha más canilla para por lo menos empatar a Ernesto, detalle que dudamos toda vez que sus estrategias se pierden en pequeños remolinos de viento y así no va a lograr su propósito.
5.- Como decía José Encarnación Alfaro. Si en el interior del PRI predomina el canibalismo y la desunión extrema, entonces el dedo del señor Peña Nieto pudiera ir por alguien externo que no aparezca en las encuesta y que aglutine a todos los aspirantes dibujándose él como posible agente esperanzador que en lo personal lo veo difícil pero no imposible. Lo mismo opina Samuel. Aunque claro, es otra vertiente de pensamiento que se puede dar.
6.- ¿Y una candidatura independiente por parte de Ernesto Gándara? Pues ya se aprobaron las candidaturas de este tipo, ahora bien, si usted se fija en la tabla siete de la encuesta, ante la pregunta: ¿con cuál partido se siente más identificado?, el 33.30 dice que el PRI, el 22.36 por el PAN pero más abajito hay un apartado que dice “candidato” que es el 23.21 y a un lado “soy independiente” con un 2.83 lo cual nos lleva a la conclusión de que las candidaturas independientes aun no son conocidas en Sonora. La gente no sabe que puede haber este tipo de candidaturas lo cual para Ernesto puede ser bueno, pues su figura por sí sola es conocida en las cuatro o cinco vueltas que le ha dado a Sonora o malo, pues la gente de alguna manera ubica mentalmente al candidato con un partido político.
Luego tenemos varias cosas en claro: ¿Qué se partiría el PRI si no es Ernesto?, quien sabe ¿y si no es Ernesto… y es Claudia y juntos hacen campaña como lo hicieron para el Senado, acaso no sería más peligroso para el PAN este escenario? Sume puntos y verá que sí. ¿O acaso si es Ernesto el bueno se le uniría Claudia?, ¿entonces, a quien le conviene más que sea candidato?, ¿ a uno solo o a dos enemigos juntos?, ¿me explico?...
La decisión sobre una candidatura independiente estimado lector en el caso de Ernesto, quien el22 de septiembre del 2014 cumplirá 54 años de edad, recuerde que es un hombre que sabe medir los tiempos, será una decisión que solamente él tomará en el debido momento. Nunca antes.
6.- Ahora bien me queda claro que si los dos Gándara son candidatos por supuesto que el Gobierno del Estado manejará todo su aparato político y por el lado de Ernesto, será sin duda el gobierno federal el que manejará su campaña por lo mismo requerirá quitar o hacer a un lado al equipo de trabajo que trae en este momento y quien sabe cómo le vaya con este accionar donde la institucionalidad deberá ser al cien por ciento.
Recuerde que Eduardo Bours se opuso al manejo del PRI nacional en la campaña y hubo gran cantidad de propaganda que no se repartió, por poner un ejemplo ramplón. El todas las puedo de Bours fracasó.
Este último escenario será muy interesante y la decisión que tome Ernesto será la que defina su destino.
EN FIN, mejor hoy por la mañana que desayunemos con Ernesto Gándara en el grupo Contrapunto 10, le vamos a preguntar sobre estos posibles escenarios. A ver qué contesta. Por hoy es todo, luego le seguimos si Dios quiere y cerramos año.