Realizan jornada de donación de sangre entre alumnos del Departamento de Ingeniería

Una jornada de donación masiva de sangre en apoyo a los hospitales locales y sus necesidades de emergencia diaria de este elemento de vida, realizó en el Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Sonora.

Daniel Zaragoza, coordinador del evento organizado en conjunto con el Centro Estatal de Transfusión Sanguínea y la Dirección de Servicios Estudiantiles, informó que en el inicio del evento se tuvo una lista de 230 posibles donadores.

“Estamos llevando a cabo una donación masiva de sangre para apoyar a los hospitales en satisfacer una necesidad que a veces resulta de gran urgencia, pues todos los días los hospitales están requiriendo sangre o fallece alguna persona por no contar con una unidad que le salve la vida”, expresó.

Comentó que no es la primera jornada que se realiza en el Departamento de Ingeniería, y aunque en otras ocasiones han registrado hasta 300 donadores potenciales, con 120 donadores efectivos, hoy se esperan a alrededor de 230 con posibilidad de que resulten, al menos, 70 u 80 donadores efectivos, de acuerdo a las estadísticas.

Explicó que los muchachos recibieron una charla sobre la importancia de una donación de sangre y, posteriormente, se les hizo una entrevista, luego una toma de muestra y, si son aptos, entonces pasan al área de sangrado. “Este proceso se está llevando a cabo en el Departamento de Ingeniería Civil”, detalló.

Recordó que la Universidad ha realizado ya varias jornadas de donación de sangre entre diferentes sectores de la institución, y en el Departamento de Ingeniería se han realizado dos con gran éxito y muy buena respuesta por parte de los estudiantes, quienes muestran un desinteresado amor hacia la humanidad para salvar vidas.

Daniel Zaragoza compartió que él es una persona que le debe la vida a más de 2,000 donadores por la enfermedad que padece y que ataca su sistema inmunológico, mismo que ha dañado seriamente a sus riñones.

“Yo he tenido la necesidad de donadores, y la sociedad, sin importar quién soy, dónde vivo, o mi clase, han acudido para darme un poco de la sangre, y a todos ellos les debo la vida, y esto --la jornada-- es una forma de retribuir a esa responsabilidad social que tenemos ante una necesidad emergente de este recurso”, comentó.

El académico mencionó que los donadores son voluntarios y, básicamente, son estudiantes de las licenciaturas en Ingeniería Civil, Ingeniería Industrial e Ingeniero Minero, además de Derecho y Psicología.

“Yo invitaría a la sociedad en general, a todos los estudiantes, a todas aquellas personas que son sanas, para que compartan un poco de su vida; con una unidad de sangre podemos salvar hasta cuatro personas, y sólo necesitamos 30 minutos de nuestro tiempo”, enfatizó, y añadió que todos podemos hacer que un niño vuelva a jugar o que un padre vuelva a casa al lado de sus hijos.