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El éxito de Elena Rivera

2016-05-29 | Armando Vásquez A. | Sección:

LO BUENO DE CONTAR con una columna independiente es que uno puede escribir de lo que le venga en gana. Hoy quiero tratar el tema del éxito de Elena Rivera, pero de manera indirecta.

Para entender la trascendencia del tema vale la pena introducirnos a tres temas básicos, contextualizados en la rama política, periodística y cultural y sazonado con ingredientes comunes como la ignorancia, independencia, envidia, promoción y una pizca de madurez.
En lo político: El video del diputado David Palafox y su ataque de risa trascendió las fronteras y regresó. Se vio en muchas partes, salió en noticieros, periodistas como López Dóriga lo manejaron. Promocionalmente fue un hit… y fue un ataque de risa.
Las reacciones fueron diversas desde periodistas amargados que no son felices si no contaminan su alrededor que hablaron de la irresponsabilidad del diputado, hubo políticos que criticaron hablando de que no fuera panista, entonces sí lo hubieran hecho trizas o aquellos que calificaron dicho ataque como algo simulado, una preparación anticipada con tal de ganar puntos en los diferentes medios.
Como si los ataques de risa pudieran generarse de manera natural. Lo bueno, es que fueron los menos pero sirve para contar con un marco de referencia que nos permite crear una característica y ubicarla en un contexto más adecuado. La mayoría de la gente se rio por lo contagioso que es un ataque de risa.
Ahora tomemos el caso del tema de los matrimonios entre iguales y su derecho a la adopción de niños que en redes siempre está presente.
Me llama la atención que en el caso de las redes sociales, por lo menos en Hermosillo y me atrevo a decir que en el resto del Estado, es un tema que no se toma a la ligera. No es que haya indiferencia, pero son escasos los que emiten una opinión a favor o en contra tanto en facebook como en twitter. Cheque el dato y verá que tengo razón. Como que es el niño enfermo que escondemos en el clóset y que no queremos que nadie conozca y más cuando nos damos cuenta que las respuestas emitidas son extremosas.
Mejor no opinar públicamente y como que la mayoría de los usuarios tenemos de cerca o conocen a algún homosexual o lesbiana y se detienen pues no saben qué punto de vista externar sin lastimar, sin herir y sin que el resto lo satanice a uno. Es un tema difícil que tendrá que ser impuesto en base a ese paquete de características que encierra el fenómeno político conocido como la tiranía de las minorías. No es indiferencia, simplemente no sabemos cómo externarlo delicada y eficazmente.En el terreno periodístico, la salida del noticiero 24 horas emitida por Joaquín López Dóriga y con sus cuatro millones de seguidores de twitter a todo lo que daban apoyándolo, acarreó opiniones diversas pero con dicho anuncio su promoción se fue a las nubes generando, como el resto de los casos mencionados lo que llaman un Trending topic que wiki nos dice: es una de las palabras o frases más repetidas en un momento concreto en Twitter. Los diez más relevantes se muestran en la página de inicio, pudiendo el usuario escoger el ámbito geográfico que prefiera, mundial o localizado, o personalizadas, en función además de a quién sigue el propio usuario. La gran repercusión que están teniendo en la prensa ha provocado que esta expresión sea utilizada también para denominar un tema de gran interés, esté o no siendo comentado en la red social.
Entonces, hubo quienes se alegraron y lo tacharon de ser una mala influencia para México junto con Televisa.
Pero me detengo en este punto para señalar que nunca estará preocupado por lo que diga una persona, grupo u organización cuyos seguidores en twiter sean menores de cien mil o bien, que cuenten con la suficiente capacidad, renombre o influencia que le permita volver la vista y contestarle educada o funestamente, dependiendo de quién sea el crítico.
Ahora sí, del éxito de María Elena García Rivera (Elena Rivera es su nombre artístico puesto en honor a su mamá por detalles ya conocidos), vale la pena decir que en lo personal y aun cuando José Carreras es el monstruo, Elena no se quedó atrás al momento de elevar su maravillosa voz y sostenerla a los niveles que pedía el tenor y más allá de lo que el mismo Carreras pedía. No se necesita ser un especialista en opera para entender este detalle tan básico.
Estaba allí, abajo, de pie, pegado al escenario pero al lado izquierdo, donde una malla nos separaba del camerino improvisado y clarito escuché después del primer tema cantado a dúo, cuando Carreras alababa su presentación, su voz, “muy bien” le llegó a decir, y ya para que un personaje maduro, de setenta años, que tanto ha vivido diga un reconocimiento en corto, no creo que sea fácil. Pero ni hablar, los oí clarito.
Claro está que Elena Rivera ya cuenta con experiencia internacional y aunque cantar a un lado de Carreras es un hecho trascendental en su vida, es una experiencia que deberá sumarse a las que ha vivido durante años en los mejores escenarios de Europa, Asia, y más lugares de aquella parte del mundo.
Cabe decir que se convirtió su presentación en Trending topic hasta las tres de la mañana ese jueves en twitter tanto en Sonora como allende las fronteras nacionales.Y claro, atrás quedaron aquellas bullas, los lances hirientes, las mentadas, el desdén con el que trataron al “españolito” como le dicen a su esposo (llegaron a mi esas expresiones) por ser funcionario de gobierno y que, dijeron esas voces venenosas, le debía a él la presentación de Elena con Carreras (desdeñando su talento) y que nunca entendieron que fue el tenor quien la escogió a ella por ser la mejor, tal y como lo demostró.
Curioso, son voces críticas, que no proponen, sino que buscan llamar la atención en base a la sordidez, al no aceptar talentos que no sean similares a los que consideran deben contar con las características que ellos proponen, son tipos contaminantes con su pluma y sobre todo, que dan weba por su falta de madurez. Nunca lo superarán y morirán roídos por dentro, como los ratones secos.
Así y si hacemos una combinación de las características de cada uno de los casos tratados, tendremos que en el caso de Elena se mezclaron la mayoría, desde la sospecha de no ser verdadero y fabricado el ataque de risa, la ignorancia del tema y el no poder participar a favor o en contra, la falta de valía (cuantitativa) de los atacantes y el famoso Trending topic causado que a final de cuentas son los otros aplausos, los que no se escuchan como ocurrió con el público presente pero que igual tiene un peso y valor cualitativo de enorme trascendencia.
EN FIN, enhorabuena y felicidades a Elena Rivera cuyos éxitos seguirán, sin duda alguna. Mañana le seguimos si Dios quiere.