Requiere Unison un programa puente

2025-07-02 | Armando Vásquez A. | Columna Archivo Confidencial
6336435970_e82257563d_b

ES UN PROBLEMA Cíclico que ocurre durante mayo y julio, aunque este año se presentó con mayor intensidad por el rechazo de cuatro mil aspirantes (de 16 mil) a ingresar a la Unison en este período académico y que representa el 23.5% de los aspirantes efectivos. Los padres de familia y el Staus han manejado las protestas argumentando la defensa de la justicia educativa e incluso que quiten el examen de admisión y que sea enteramente gratuita, aunque la ley orgánica 169 maneja el concepto de gratuidad progresiva.

Hay una demanda insatisfecha y atípica en Ciencias de la Salud, (Medicina, Odontología y Enfermería), imposible de sostener por la falta de infraestructura de la Unison, su limitado presupuesto (tres mil 460 mdp para este año del cual se utiliza solo el 9% para instalaciones, --cerca de 300 mdp--, el resto se va en pago de nómina y gasto corriente), por lo que no se puede acomodar la creciente afluencia de aspirantes, proyectada a aumentar del 5% al 10% en 2026.

Pero hay una solución. A lo mejor ya se les ocurrió.

Es factible que la Unison desarrolle un programa puente de un año que pudiera ser permanente y que rente ochenta aulas (cincuenta alumnos por salón) de preparatorias como Cobach Villa de Seris, Reforma y Cecytes Hermosillo I y 40 privadas (Instituto Kino, Colegio Muñoz, entre otras que cuentan con ciertos requisitos como laboratorios) pues la demanda de los rechazados se centra en Hermosillo (60%), Cajeme (20%), Nogales (10%) y otros campus (10%).

Las clases serían nocturnas, de 6 a diez de la noche apoyadas por nueve rutas del HBus y cinco unidades adicionales (para los otros campus) con lo cual podría asegurarse la accesibilidad sin interrumpir las operaciones diurnas de las preparatorias.

Este programa puente duraría de agosto de 2025 a mayo de 2026 y se contaría con la capacidad de inscripción de cuatro mil estudiantes en cursos troncales alineados con los planes de estudio de Unison. Para los tres mil 200 estudiantes que aspiran a Ciencias de la Salud, los cursos incluirían Biología Celular, Química General, Física Básica, Matemáticas Aplicadas e Introducción a la Anatomía (24-36 créditos).

Los 800 restantes, que aspiran a Administración o Ingeniería, estudiarían Introducción a la Administración, Matemáticas Financieras, Contabilidad Básica y Estadística. Asimismo, habría un módulo de preparación para el Exani II --no revalidable—para mejorar sus posibilidades de admisión en el siguiente ciclo, pero serían materias revalidadas.

Bajo el artículo 12 relacionado con Criterios de la Unison y conforme a la nueva ley, los estudiantes necesitarán un promedio de 8.0 y 80% de asistencia para la revalidación de créditos asegurando una progresión equivalente a un semestre o un año conforme a los lineamientos de la Secretaría General Académica que deberá supervisar la calidad, alineándose con los estándares acreditados por Conahcyt.

Según mis cálculos, el costo del programa sería de 167.1 mdp por año (equivalente a 4.83% del presupuesto), pues se cubre el alquiler de aulas (7.6 millones: 1.6 millones públicas, 6 millones privadas para que sea atractivo, haga la división para que sepa cuanto por aula), 160 instructores (32 millones), materiales y administración (2.5 millones), becas (120 millones, tres mil pesos mensuales por estudiante) y expansión del HBus (5 millones).

El financiamiento provendría de la reasignación del 50% del presupuesto de infraestructura (155 millones), el Fideicomiso de Cuotas (155.7 mdp), becas del IBCEES y asociaciones con los sectores minero o tecnológico de Sonora.

Para que esto funcione su implementación debe empezar ya negociando con preparatorias, (con universidades es más complejo, aunque claro, pudieran enlazar intereses pero salvo la UES, las privadas son muy costosas), diseñando planes de estudio con el Colegio Académico y registrando a los estudiantes a través de www.aspirantes.unison.mx pues las clases comenzarán el diez de agosto –acorde con el programa de la Unison--, con evaluaciones en diciembre y mayo, emitiendo certificados en junio de 2026 para una admisión a futuro priorizada y con cierta ventaja, siempre y cuando no quiten el examen.

Claro que este programa puente –que, por cierto, en su momento el mismo Cobach lo implementó--, sufrirá ajustes para 2026-2027, en función de la demanda, los resultados del piloto y la capacidad de la Unison. Si las solicitudes aumentan a 18,000-19,000, con 4,500-5,000 rechazos, se podrían necesitar 90-100 aulas, con un costo de 180-200 millones de pesos. Si la Unison agrega 2,000-3,000 lugares permanentes (por ejemplo, nuevos edificios para Ciencias de la Salud), el programa podría reducirse a 60-70 aulas para 3,000-3,500 estudiantes. El HBus deberá agregar 2 o 3 unidades si la demanda crece.

Para una optimización de costos bien pudiera reducirse las tarifas de las preparatorias públicas (15,000 pesos por aula en lugar de las veinte mil iniciales), más cursos en línea (ahorrando 10 millones) y un aumento en la financiación del Instituto de crédito o del sector privado. A esto hay que agregarle los refinamientos académicos, como una capacitación mejorada para el Exani II (insisto, si no lo quitan) o habilidades de laboratorio, y la admisión garantizada en 2026 para cuatro mil estudiantes, acción fundamental para tranquilidad de los padres de familia y los mismo futuros alumnos y evitar así nuevas protestas.

El programa puente elimina la exclusión de la que tanto se quejan, se avanzaría en 24-36 créditos y se alinea con las políticas federales de educación gratuita. Es más barato que pensar en la construcción de nueva infraestructura (por ejemplo, hay destinados cinco millones de pesos para un edificio en Cajeme que atiende a 500 estudiantes).

La nueva rectora, Dra. Dena María Jesús Camarena Gómez tiene que tomar el toro por lo cuernos pues la apertura de mil 140 espacios nuevos para este año y el programa de corrimientos de lista para hoy y el cuatro de este mes, son medidas insuficientes. Se requieren soluciones efectivas y perdurables.

Por supuesto, este programa puente requiere del apoyo del gobernador y de los diputados, así como la creación de una comisión universitaria (incluyendo al Staus), que coordine los esfuerzos requeridos y, sobre todo, una comunicación clara y precisa para que no se engrille la iniciativa que sería novedosa y factible.

Por cierto, la UNAM cada año rechaza a cien mil aspirantes, pero allá tienen otro tipo de tratamiento y la lana del mundo.

EN FIN, por hoy es todo, mañana le seguimos si Dios quiere.

Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 35 años de experiencia en medios escritos y de internet, cuenta licenciatura en Administración de Empresas, Maestría en Competitividad Organizacional y Doctorando en Administración Pública. Es director de Editorial J. Castillo, S.A. de C.V. y de “CEO”, Consultoría Especializada en Organizaciones…                                                                                                                                                                                                                                  

Correo electrónico: archivoconfidencial@hotmail.com                                                                                      

Twitter:   @Archivoconfiden                                                                                               

 https://www.facebook.com/armando.vazquez.3304