De la Ciudad Solar al Estado Solar
COLUMNA OLOR A DINERO
Por: Feliciano J. Espriella
El desarrollo de Sonora no puede depender de viejas fórmulas. En la era de la inteligencia artificial y la energía limpia, se requiere un liderazgo con visión tecnológica, sostenible y humana. Toño Astiazarán ha demostrado que ese modelo es posible.
En un mundo que cambia a la velocidad de la tecnología, los gobiernos que no se actualizan están condenados a la irrelevancia. Las nuevas generaciones no exigen discursos, exigen soluciones inteligentes; no quieren promesas, quieren innovación. Por eso, cuando se habla del futuro político de Sonora, la discusión ya no debería centrarse en los viejos esquemas de poder, sino en quién tiene la capacidad de conectar al estado con la nueva era digital y energética que domina al planeta.
La modernización ya no es un lujo: es una obligación. Las ciudades que entienden el papel de la tecnología, la inteligencia artificial y las energías limpias como motores del bienestar, son las que garantizan empleos, competitividad y calidad de vida. En ese contexto, Sonora tiene una oportunidad histórica: consolidar el modelo que Hermosillo ha iniciado bajo el liderazgo de Antonio “Toño” Astiazarán Gutiérrez.
Desde su llegada a la alcaldía, Astiazarán transformó la capital sonorense en un laboratorio de innovación cívica. La “Ciudad Solar” no es una etiqueta de campaña: es un proyecto tangible y reconocido internacionalmente. Flotillas de patrullas eléctricas, camiones recolectores que funcionan con energía limpia y edificios públicos con paneles solares no son ideas en papel, sino políticas en acción. Además, su programa para que familias de bajos recursos accedan a energía solar en sus hogares representa una democratización del progreso pocas veces vista en la política local.
No es casual que figuras de talla mundial como Steve Wozniak,
cofundador de Apple, hayan reconocido públicamente esa visión. Durante el Cuarto
Foro Mundial de Energía Solar, Wozniak expresó su admiración por la
transformación de Hermosillo y subrayó algo esencial: “La tecnología siempre
debe estar al servicio de las personas para hacer la vida más conectada y
eficiente”.
Ese principio, que combina humanismo y modernidad, es la esencia del proyecto
que Toño Astiazarán ha impulsado en Hermosillo.
En contraste, buena parte de la clase política sigue anclada en
paradigmas del siglo pasado. Gobernar ya no consiste en administrar, sino en
anticipar. Los retos del futuro —energía, agua, movilidad, empleo, seguridad—
exigen mentes abiertas, líderes capaces de entender cómo la tecnología y la
sostenibilidad se entrelazan para mejorar la vida cotidiana.
Ahí es donde la experiencia y la visión de Astiazarán marcan la diferencia.
Transformar a Hermosillo en la primera Ciudad Solar de México no fue producto de la casualidad, sino del trabajo sistemático, de la gestión ante organismos nacionales e internacionales, y de una convicción profunda: que el futuro se construye con energía limpia, innovación y participación ciudadana. Si como alcalde logró hacer de la capital un referente mundial, es lógico imaginar lo que podría hacer al frente del estado.
Sonora tiene todas las condiciones para convertirse en un Estado Solar: vastos territorios, radiación solar inigualable, universidades y centros de investigación, y una nueva generación de empresarios que entiende la sostenibilidad como ventaja competitiva. Lo único que falta es liderazgo: alguien que conecte esos puntos y proyecte a Sonora hacia el futuro con estrategia y conocimiento.
El desarrollo sostenible no se decreta: se planea, se ejecuta y se mide.
Hermosillo lo ha demostrado con resultados. El siguiente paso es escalar esa
visión a nivel estatal.
Si Sonora quiere competir en la economía global, atraer inversión verde y
generar empleos bien remunerados, necesita un gobernador que hable el idioma de
la innovación, que comprenda la inteligencia artificial no como moda, sino como
herramienta de gobierno. Y en ese terreno, Toño Astiazarán no sólo va un paso
adelante: va en la dirección correcta.
La historia moderna premia a quienes se atreven a ver más lejos. Sonora merece un liderazgo de esa talla. Porque el futuro no se espera: se diseña.
Me despido con un comercial: sintonicen a las 6:10 AM, "La Caliente" 90.7 FM., el colega y amigo José Ángel Partida me abre un espacio en su noticiero en el que comentaremos con más detalle esta columna. ¡No se lo pierdan!
Por hoy fue todo, gracias por su tolerancia y hasta la próxima.